detente

Me sente afuera de la catedral de mi ciudad, esa misma que queda en el centro mismo , y que es inmensa y gris, donde la gente afuera pide dinero para subsistir , y adentro estan los que piden para que los de afuera no pidan, pero que cuando salen no desenvolsan ni siquiera una moneda de $100.
Afuera de ese mismo lugar, solte mi bolso para esparramarme en las escalerillas, y saque mi croquera paa dibujar alguna cosa que me llamase la atencion.
Mi croquera permanecio blanca y pulcra a lo largo del dia, viendo pasar a las personas , diferentes rostros , narices , ojos y pensamientos supongo. Me adentre en la fisonomia de los individuos que caminaban por ahi, a ese ejecutivo apurado que con su bluetooth camina con un maletin lleno de no se que cosa, la señora que lentamente con un ramillete de flores mira hacia arriba sorprendiendose como siempre de lo contemporaneo de que el mundo esta, y los niñitos aferrados a su mamá , que no hacen mas que pedir dulcecitos aun no concientes del valor indeseado del dinero, ignorancia divina que nadie tiene, pensando aun que surge por generacion espontanea, como muchos creen.

Y asi contuve en mis manos mi lapiz grafito, miraba a toda esa gente pasar, tratando de captar mas lento su andar, pero cada vez mas me daba cuenta de lo rapido que la gente anda , y no se percatade que hay tantos lugares donde reposar y reirse de las personas que no se detienen ni por un segundo .Me gusta ser espectadora de lo que las personas ignoran, como que el paso ligero de las vidas puede depararnos sopresas como lo es , despues de 5 años viviendo en esta ciudad, darse cuenta de la existencia de un reloj arriba de un edificio ,mas antiguo que una receta de cocina ancentral.

La escaleras de la catedral aparentemente no es solo para subirla o bajarlas aparentemente, sino para sentarnos y deternernos. ¿Deterernos para ver que ? ver lo que se pierden las personas apresuradas en su paso. Ser parte del 1 % de los que ralentizamos el paso, y miramos lentamente para encontrar algo nuevo.